La novia llegó a la iglesia de su pueblo natal una hora más tarde de lo previsto.
Con un vestido, entre delicado y sexy, recibió el sacramento del matrimonio y la bendición de cuatro curas.
Tras una caravana que unió Arequito con Rosario, el “tifón” y Jeremías llegaron al salón Metropolitano cerca de la medianoche.
Muchos famosos faltaron a la cita y los invitados les regalaron la luna de miel por Europa y Centro América.
Soledad y Jeremías dieron el sí ante Dios. Eligieron una iglesia de su pueblo y luego una megafiesta en Rosario. De punta en blanco, recibieron el sacramento del matrimonio y necesitaron de cuatro curas para sellar el amor. En medio de fuegos artificiales y cantos de fanáticos y habitantes de Arequito, los novios partieron para el salón de un shopping rosarino, donde terminaron de cumplir la boda soñada hasta el amanecer.La localidad del sur santafesino se vio revolucionada este sábado por el casamiento de la figura más representativa. Una población de casi ocho mil personas de clara identidad agrícola ga
“Estoy feliz con el vestido de Laurencio, él lo diseñó hace dos años, y es hermoso, decidí ponerme todo encima, es mi casamiento y me quise lucir”. Sostuvo la novia muy emocionada. nadera. Las cercanías de la iglesia Nuestra Señora del Rosario vivieron una revolución. Vieron llegar traffics y colectivos de diversas partes del país para el evento del año. Frente a la parroquia, como todo pueblo, la plaza San Martín. Más de tres mil almas se apersonaron para ver la llegada de los novios y los ilustres invitados.El primer famoso en desembarcar fue Raúl Portal y su esposa Lucía. Sin Chicha Candela (adujo la ausencia a las bajas temperaturas), el conductor del mítico NotiDormi, se presentó como el “patovica intelectual de Soledad”. “Soy el que la defiende cuando todos la critican”, remató. Atrás llegaron Facundo Saravia, el más joven de Los Chalchaleros y Paola Prenat, la rubia panelista de Acoso Textual y figura acosada por el muñeco Pepe Pompín en Desayuno.Minutos más tarde fue el turno de Alejandra Darín y la parejita formada en Padre Coraje, Melina Petriella y Fabio Di Tomasso.Con un lila intenso y un vestido de Claudio Cosano, llegó “la Naty”, hoy más conocida por sus malabares en el Circo de las Estrellas de Susana Giménez que por ser la hermana de Soledad o la otra Pastorutti. “Estoy muy feliz por el casamiento y la familia está revolucionada”, arremetió.Jeremías llegó a la iglesia a los apurones. Aunque la que tarde es la novia, el muchacho entró a la iglesia con el saco en la mano y el cabello recién lavado. “Estoy muy tranquilo, estoy demorado y a los apurones, somos una familia grande y tardamos para bañarnos”, humorizó el flamante novio, vestido para la ocasión con un traje diseña por Tito, de Matices.En un auto importado azul llegó la Sole, más que nunca el “tifón de Arequito”.
“Hace un año que organizamos esto y estuve en todos los detalles”. “Es la noche más importante de mi vida”, Comentó Soledad No tan blanca, pero sí radiante, desplegó sus más de cuatro metros de cola, tul de gasa con bordados en dorado. El oro también se vio reflejado en su traje diseñado por Laurencio Adot, con los hombros al descubierto, falda larga y zapatos de Ricky Sarkany. El peinado, media cola con bucles en las puntas y extensiones y en las manos un ramo de orquídeas. Y, comandada por un cortejo de niños (cinco nenes y tres nenas, hijos de familiares y amigos de la pareja), la novia entró a la iglesia.La ceremonia estuvo a cargo del padre Jorge Nardi, pero otros tres participaron de la misa, Ariel Barbero, Walter Luque y José María Lamas. Además, los que aguardaron en los frentes e inmediaciones pudieron ver el casamiento que se reproducía por una pantalla gigante. La emoción llegó cuando el cura enunció las palabras claves y preguntó: “Se comprometen a amarse, a colaborar con la obra creadora de Dios y la comunión de la familia”. Con un primer beso en la mejilla, los novios dieron el sí y la plaza vibró con un “la Sole tiene aguante”. Pero dentro de la parroquia, la encargada de cantar el Ave María fue la profesora de canto de Pastorutti, Susana Naidich.La salida de la pareja motivó desmanes y corridas entre los presentes que derribaron las vallas e intentaron saludar a los novios. Sin poder escapar hacia el auto, Soledad y Jeremías dialogaron de forma escueta con los periodistas. “Para mí es una noche muy importante, estoy emocionada, con el hombre que amo y en mi ciudad”, emocionó la cantante y concluyó: “Es la noche más feliz de mi vida”.Fantástica fiestaLas luces del Salón Metropolitano, ubicado en el shopping Alto Rosario, iluminaron por primera vez, y hasta ayer estuvieron colocando vidrios para la inauguración. Con mesas dispuestas para 750 invitados, algunas malas lenguas señalaron que los comensales no llegaron a los 400. A los famosos invitados que concurrieron a la iglesia se sumaron la cantante Marcela Morello, el productor de BMG Afo Verde y Juan Alberto Mateyko y su hija Rosa María.“Es una noche espectacular y todo pensado por los novios”, dijo el wedding planner, Adrián Pavía. La fiesta comenzó con una recepción con tablas de campo y quesos estacionados. La entrada fue un minishot de humita con tostadas y provolone. El plato principal afirman que fue abundante: cordero arrollado al romero, con guarnición de batatines y papines del norte. El postre fue un crumble de manzanas glaceadas y el vino y champagne elegido fue de Finca El Portillo. La bebida acompaña a los invitados hasta el amanecer, “aunque tenemos todo listo para terminar la boda a las 9 de la mañana con un desayuno”, exclamó el organizador del casamiento.La decoración fue pensada por la cantante y tuvo telas blancas y velas por doquier. Para la hora de la diversión, los motivos de cotillón tienen una lógica carnavalesca, “pero de Gualeguaychú
Con un vestido, entre delicado y sexy, recibió el sacramento del matrimonio y la bendición de cuatro curas.
Tras una caravana que unió Arequito con Rosario, el “tifón” y Jeremías llegaron al salón Metropolitano cerca de la medianoche.
Muchos famosos faltaron a la cita y los invitados les regalaron la luna de miel por Europa y Centro América.
Soledad y Jeremías dieron el sí ante Dios. Eligieron una iglesia de su pueblo y luego una megafiesta en Rosario. De punta en blanco, recibieron el sacramento del matrimonio y necesitaron de cuatro curas para sellar el amor. En medio de fuegos artificiales y cantos de fanáticos y habitantes de Arequito, los novios partieron para el salón de un shopping rosarino, donde terminaron de cumplir la boda soñada hasta el amanecer.La localidad del sur santafesino se vio revolucionada este sábado por el casamiento de la figura más representativa. Una población de casi ocho mil personas de clara identidad agrícola ga
“Estoy feliz con el vestido de Laurencio, él lo diseñó hace dos años, y es hermoso, decidí ponerme todo encima, es mi casamiento y me quise lucir”. Sostuvo la novia muy emocionada. nadera. Las cercanías de la iglesia Nuestra Señora del Rosario vivieron una revolución. Vieron llegar traffics y colectivos de diversas partes del país para el evento del año. Frente a la parroquia, como todo pueblo, la plaza San Martín. Más de tres mil almas se apersonaron para ver la llegada de los novios y los ilustres invitados.El primer famoso en desembarcar fue Raúl Portal y su esposa Lucía. Sin Chicha Candela (adujo la ausencia a las bajas temperaturas), el conductor del mítico NotiDormi, se presentó como el “patovica intelectual de Soledad”. “Soy el que la defiende cuando todos la critican”, remató. Atrás llegaron Facundo Saravia, el más joven de Los Chalchaleros y Paola Prenat, la rubia panelista de Acoso Textual y figura acosada por el muñeco Pepe Pompín en Desayuno.Minutos más tarde fue el turno de Alejandra Darín y la parejita formada en Padre Coraje, Melina Petriella y Fabio Di Tomasso.Con un lila intenso y un vestido de Claudio Cosano, llegó “la Naty”, hoy más conocida por sus malabares en el Circo de las Estrellas de Susana Giménez que por ser la hermana de Soledad o la otra Pastorutti. “Estoy muy feliz por el casamiento y la familia está revolucionada”, arremetió.Jeremías llegó a la iglesia a los apurones. Aunque la que tarde es la novia, el muchacho entró a la iglesia con el saco en la mano y el cabello recién lavado. “Estoy muy tranquilo, estoy demorado y a los apurones, somos una familia grande y tardamos para bañarnos”, humorizó el flamante novio, vestido para la ocasión con un traje diseña por Tito, de Matices.En un auto importado azul llegó la Sole, más que nunca el “tifón de Arequito”.
“Hace un año que organizamos esto y estuve en todos los detalles”. “Es la noche más importante de mi vida”, Comentó Soledad No tan blanca, pero sí radiante, desplegó sus más de cuatro metros de cola, tul de gasa con bordados en dorado. El oro también se vio reflejado en su traje diseñado por Laurencio Adot, con los hombros al descubierto, falda larga y zapatos de Ricky Sarkany. El peinado, media cola con bucles en las puntas y extensiones y en las manos un ramo de orquídeas. Y, comandada por un cortejo de niños (cinco nenes y tres nenas, hijos de familiares y amigos de la pareja), la novia entró a la iglesia.La ceremonia estuvo a cargo del padre Jorge Nardi, pero otros tres participaron de la misa, Ariel Barbero, Walter Luque y José María Lamas. Además, los que aguardaron en los frentes e inmediaciones pudieron ver el casamiento que se reproducía por una pantalla gigante. La emoción llegó cuando el cura enunció las palabras claves y preguntó: “Se comprometen a amarse, a colaborar con la obra creadora de Dios y la comunión de la familia”. Con un primer beso en la mejilla, los novios dieron el sí y la plaza vibró con un “la Sole tiene aguante”. Pero dentro de la parroquia, la encargada de cantar el Ave María fue la profesora de canto de Pastorutti, Susana Naidich.La salida de la pareja motivó desmanes y corridas entre los presentes que derribaron las vallas e intentaron saludar a los novios. Sin poder escapar hacia el auto, Soledad y Jeremías dialogaron de forma escueta con los periodistas. “Para mí es una noche muy importante, estoy emocionada, con el hombre que amo y en mi ciudad”, emocionó la cantante y concluyó: “Es la noche más feliz de mi vida”.Fantástica fiestaLas luces del Salón Metropolitano, ubicado en el shopping Alto Rosario, iluminaron por primera vez, y hasta ayer estuvieron colocando vidrios para la inauguración. Con mesas dispuestas para 750 invitados, algunas malas lenguas señalaron que los comensales no llegaron a los 400. A los famosos invitados que concurrieron a la iglesia se sumaron la cantante Marcela Morello, el productor de BMG Afo Verde y Juan Alberto Mateyko y su hija Rosa María.“Es una noche espectacular y todo pensado por los novios”, dijo el wedding planner, Adrián Pavía. La fiesta comenzó con una recepción con tablas de campo y quesos estacionados. La entrada fue un minishot de humita con tostadas y provolone. El plato principal afirman que fue abundante: cordero arrollado al romero, con guarnición de batatines y papines del norte. El postre fue un crumble de manzanas glaceadas y el vino y champagne elegido fue de Finca El Portillo. La bebida acompaña a los invitados hasta el amanecer, “aunque tenemos todo listo para terminar la boda a las 9 de la mañana con un desayuno”, exclamó el organizador del casamiento.La decoración fue pensada por la cantante y tuvo telas blancas y velas por doquier. Para la hora de la diversión, los motivos de cotillón tienen una lógica carnavalesca, “pero de Gualeguaychú
No hay comentarios.:
Publicar un comentario