Despedida de soltera
La cantante de Arequito cierra el festejo de sus 10 años de carrera con dos shows en el Gran Rex. En 2007 hará una pausa. Guardará el poncho durante varios meses y aprovechará para casarse con su novio Jeremías.
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"Fue maravilloso", recuerda la Sole. "Era la primera que vez que me presentaba en un teatro. En esa época había participado de "La noche de los jóvenes", en el Luna Park, una especie de festival folclórico con artistas jóvenes a cambio de que ese representante me apoyara luego para hacer algo sola. Así surgió la chance de hacer un Gran Rex. Pero gracias a la euforia y a la demanda fueron diez".
¿Cuáles son los planes para los shows de mañana y pasado?
Serán diferentes. En estos 10 años acumulé más de 100 canciones en mi repertorio y quiero ser lo más justa posible con ellas. Por eso no cantaré lo mismo los dos días. Además, va a haber invitados diferentes. Mañana estará Facundo Saravia y alguno más que me confirme. El domingo, Luciano Pereyra, Abel Pintos y Mario Agostini.
¿Dos funciones nada más? ¿Y si pasa lo mismo que hace 10 años, estás preparada?
Nooo, no lo creo, aunque las ventas de entradas van muy bien. Es que con esto de que se filtró la información de mi casamiento... me sirvió mucho para hablar del show. Y de verdad se los agradezco.
Hablemos del casamiento, entonces...¿para cuándo los confites?
Queríamos casarnos en verano pero justo los dos tenemos mucho trabajo en esa época del año. Almanaque en mano, nos decidimos por el mes de abril, el sábado 21. El mismo día que se casaron mis viejos.
¿Y de quién fue la idea de concretar?
Nosotros siempre hablamos de casamiento. La realidad es que nos cansamos de esta situación de noviazgo "te visito un ratito en tu casa y después me voy". Queremos convivir. Con Jere tenemos un noviazgo re tradicional, respetamos mucho la forma de pensar de mis viejos, que son bastante chapados a la antigua. Y sentimos que ya está, que esa etapa ya pasó.
¿A dónde piensan casarse, acá o en Arequito?
Nos encantaría en Arequito, aunque recibimos tentadoras ofertas de Buenos Aires para hacerlo en lugares muy lindos. Es que la lista de invitados ya suma... 500 personas.
¿Y todavía hay más para agregar?
Sí. Es que los dos somos personas muy populares entre nuestra gente. Para mi cumpleaños estoy siempre en Arequito y hago reuniones para 150 personas. Me encanta festejar.
¿A dónde van a vivir?
Un poco allá y otro poco acá. Como ahora. En Arequito nos estamos construyendo una casa y acá... estamos buscando.
¿Quieren tener hijos pronto?
Nos gustaría esperar un par de años. Primero, porque nosotros nunca tuvimos un tiempo para convivir. Además, quiero seguir trabajando a full y sé que un hijo cambiaría bastante el ritmo de mi carrera.
El próximo año vas a parar por primera vez en diez años. ¿Es por el casamiento?
No, primero decidí que iba a hacer el parate y entonces se me ocurrió que podía aprovechar para casarme. No quiero desgastar mi trabajo. Estoy pasando por una etapa de compositora de canciones y la verdad es que no se puede componer en medio de la vorágine. Tampoco crecer. Quiero aprovechar ese tiempo para estudiar canto, prepararme (¿Cuánto aguantaré lejos de esta locura, no?). Lo cierto es que quiero parar porque siento que estoy en el mejor momento de mi carrera y no la quiero arruinar.
¿No te da miedo que te olviden?
Sí, claro que me asusta. Pero también pienso que un romance de 10 años no se olvida fácilmente. Creo que es el momento de parar y pensar hacia dónde voy a dar el próximo paso.
¿Significa que va a haber un cambio en tu carrera?
Por el momento no. Pero lo único concreto, por ahora, es que tengo un montón de proyectos y de canciones por terminar.
CRECIENDO
Está más madura la Sole. A punto de cumplir 26 años y darle el sí a su novio de toda la vida, Jeremías Audoglio (que también trabaja con ella), reflexiona: "Tomar hoy este tipo de decisiones no es lo mismo que hace 10 años. Antes, ni siquiera era yo quien las tomaba".
Dice también que tiene una mochila grande: dueña de una productora, toda la gente que trabaja ahí lo hace alrededor de Soledad. Por eso eligió sacarle un peso a su mochila: "Ahora están empezando a tomar otros artistas. Es que si el día de mañana hay algo que me impide cantar ¿cómo subsistirá todo esto?". Por eso, durante el tiempo que pase debajo de los escenarios (desde abril del 2007 hasta fin de año), la Sole quiere hacer crecer la otra parte del negocio, "para que no dependan tanto de mi", dice.
Y hay más razones. "También planeo atender las demandas de mi familia y de mi pareja. Porque siempre l e b rindé más tiempo a mi trabajo y al público que a los míos. Ahora voy a ver si invierto un poco las cosas... y si resulta, claro. Quizás, en el 2007, termino siendo una ama de casa desesperada".
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